Tres pilotos de la Prefectura Naval Argentina, un ex suboficial naval y un abogado fueron detenidos por orden del juez juez federal Sergio Torres que investiga los llamados "vuelos de la muerte" de la dictadura militar, informaron hoy fuentes judiciales
Fuentes allegadas a la pesquisa indicaron que fueron apresados en las últimas horas Alejandro Domingo D’Agostino, Enrique José de Saint Georges y Mario Daniel Arru, quienes habrían piloteado, entre otros, el “vuelo anómalo” desde el cual, el 14 de diciembre de 1977, fueron arrojados los cuerpos del “grupo de víctimas de la Iglesia de la Santa Cruz”, informó la agencia Telam.
En esa orden el magistrado -con la intervención del secretario Pablo Yadarola- también dispuso la detención, en la provincia de Mendoza, del ex suboficial de la Marina Ricardo Rubén Ormello y del abogado Gonzalo Dalmacio Torres de Toloza, a quien calificaron como “fuertemente vinculado al accionar del grupo de tareas que operaba en el centro clandestino de detención”.
Las mismas fuentes señalaron que el juez prevé indagar a los detenidos en el curso de esta jornada, y respecto de Torres de Toloza una comisión del tribunal, junto a médicos forenses, se trasladará al domicilio particular del imputado ubicado en la calle Blanco Encalada al 1700, en el metropolitano barrio de Belgrano.
Allí constatarán el estado de salud del único civil a quien se acusa de participar de los “vuelos de la muerte”, ya que algunas versiones llegadas al juzgado indican que padecería una grave enfermedad cerebral, motivo por cual los expertos determinarán si está en condiciones de declarar.
Precisamente el tema de las víctimas de los secuestros en la Iglesia de la Santa Cruz, -entre ellas las monjas francesas Leonnie Duquet y Alice Domon, junto a fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo-, son materia de alegato, en estos días, del juicio oral y público que lleva adelante el Tribunal Oral Federal Cinco (TOF5).
En este desprendimiento de la “megacausa” que tramita el juez Torres se investiga “el sistema de eliminación física de personas denominado ‘vuelos de la muerte’, utilizado en la última dictadura militar del país como una metodología para deshacerse de las víctimas que antes habían sido privadas ilegítimamente de su libertad” en la ESMA.
Esos vuelos consistían “en arrojar desde aeronaves en pleno vuelo al Río de la Plata o al Mar Territorial Argentino personas que habían sido privadas de su libertad por el Grupo de Tareas”, que operaba en lo que inicialmente fue creado como instituto de formación naval y por donde pasaron, se estima, alrededor de cinco mil prisioneros.
Las víctimas elegidas por los represores eran ’trasladadas’ (eufemismo que utilizaba la dictadura para mencionar las eliminaciones físicas) desde el centro ilegal de detención a distintos aeropuertos o bases militares que contaban con pista de aterrizaje.
Una vez allí “se las ingresaba a las aeronaves desde las cuales posteriormente eran arrojadas con vida en pleno vuelo”, añadieron las fuentes que confirmaron las órdenes de detención dispuestas por Torres que se cumplieron en las últimas horas.
“Esta actividad resultaba esencial por ser el último de los eslabones de una cadena que comenzaba con las tareas de inteligencia respecto de la participación de personas en actividades calificadas como ‘terroristas’”, añadieron los informantes.
Previo el macabro embarque final los prisioneros habían sido secuestrados y mantenidos “en condiciones inhumanas de vida” en las que era constante “la aplicación de tormentos para obtener información”.
Esos diversos pasos constituyeron, según las fuentes consultadas por Télam, “en su conjunto y en forma sistemática, había sido pergeñado en el marco de la denominada ‘lucha contra la subversión’”.
La “megacausa ESMA” que tramita Torres fue reabierta tras la derogación y declaración de nulidad insalvable de las leyes de obediencia debida y punto final, y cuenta con diversos desprendimientos (“legajos”) varios de los cuales ya están en la etapa del juicio oral y público respectivo.
Cabe recordar que la causa sustanciada por Torres es un desprendimiento de la "megacausa" que investiga "el sistema de eliminación física de personas denominado 'vuelos de la muerte', utilizado en la última dictadura militar como una metodología para deshacerse de las víctimas que antes habían sido privadas ilegítimamente de su libertad" y que permanecían secuestradas en la ESMA.
De los nuevos detenidos quizás adquiera mayor análisis el de Gonzalo de Toloza, a quien Adolfo Scilingo denunció en España, como “el único civil que participaba de los ‘vuelos de la muerte’” y que desempeñó su profesión de abogado llegando a ser funcionario judicial durante la última dictadura.
FUENTE: Infoanpress
Fuentes allegadas a la pesquisa indicaron que fueron apresados en las últimas horas Alejandro Domingo D’Agostino, Enrique José de Saint Georges y Mario Daniel Arru, quienes habrían piloteado, entre otros, el “vuelo anómalo” desde el cual, el 14 de diciembre de 1977, fueron arrojados los cuerpos del “grupo de víctimas de la Iglesia de la Santa Cruz”, informó la agencia Telam.
En esa orden el magistrado -con la intervención del secretario Pablo Yadarola- también dispuso la detención, en la provincia de Mendoza, del ex suboficial de la Marina Ricardo Rubén Ormello y del abogado Gonzalo Dalmacio Torres de Toloza, a quien calificaron como “fuertemente vinculado al accionar del grupo de tareas que operaba en el centro clandestino de detención”.
Las mismas fuentes señalaron que el juez prevé indagar a los detenidos en el curso de esta jornada, y respecto de Torres de Toloza una comisión del tribunal, junto a médicos forenses, se trasladará al domicilio particular del imputado ubicado en la calle Blanco Encalada al 1700, en el metropolitano barrio de Belgrano.
Allí constatarán el estado de salud del único civil a quien se acusa de participar de los “vuelos de la muerte”, ya que algunas versiones llegadas al juzgado indican que padecería una grave enfermedad cerebral, motivo por cual los expertos determinarán si está en condiciones de declarar.
Precisamente el tema de las víctimas de los secuestros en la Iglesia de la Santa Cruz, -entre ellas las monjas francesas Leonnie Duquet y Alice Domon, junto a fundadoras de las Madres de Plaza de Mayo-, son materia de alegato, en estos días, del juicio oral y público que lleva adelante el Tribunal Oral Federal Cinco (TOF5).
En este desprendimiento de la “megacausa” que tramita el juez Torres se investiga “el sistema de eliminación física de personas denominado ‘vuelos de la muerte’, utilizado en la última dictadura militar del país como una metodología para deshacerse de las víctimas que antes habían sido privadas ilegítimamente de su libertad” en la ESMA.
Esos vuelos consistían “en arrojar desde aeronaves en pleno vuelo al Río de la Plata o al Mar Territorial Argentino personas que habían sido privadas de su libertad por el Grupo de Tareas”, que operaba en lo que inicialmente fue creado como instituto de formación naval y por donde pasaron, se estima, alrededor de cinco mil prisioneros.
Las víctimas elegidas por los represores eran ’trasladadas’ (eufemismo que utilizaba la dictadura para mencionar las eliminaciones físicas) desde el centro ilegal de detención a distintos aeropuertos o bases militares que contaban con pista de aterrizaje.
Una vez allí “se las ingresaba a las aeronaves desde las cuales posteriormente eran arrojadas con vida en pleno vuelo”, añadieron las fuentes que confirmaron las órdenes de detención dispuestas por Torres que se cumplieron en las últimas horas.
“Esta actividad resultaba esencial por ser el último de los eslabones de una cadena que comenzaba con las tareas de inteligencia respecto de la participación de personas en actividades calificadas como ‘terroristas’”, añadieron los informantes.
Previo el macabro embarque final los prisioneros habían sido secuestrados y mantenidos “en condiciones inhumanas de vida” en las que era constante “la aplicación de tormentos para obtener información”.
Esos diversos pasos constituyeron, según las fuentes consultadas por Télam, “en su conjunto y en forma sistemática, había sido pergeñado en el marco de la denominada ‘lucha contra la subversión’”.
La “megacausa ESMA” que tramita Torres fue reabierta tras la derogación y declaración de nulidad insalvable de las leyes de obediencia debida y punto final, y cuenta con diversos desprendimientos (“legajos”) varios de los cuales ya están en la etapa del juicio oral y público respectivo.
Cabe recordar que la causa sustanciada por Torres es un desprendimiento de la "megacausa" que investiga "el sistema de eliminación física de personas denominado 'vuelos de la muerte', utilizado en la última dictadura militar como una metodología para deshacerse de las víctimas que antes habían sido privadas ilegítimamente de su libertad" y que permanecían secuestradas en la ESMA.
De los nuevos detenidos quizás adquiera mayor análisis el de Gonzalo de Toloza, a quien Adolfo Scilingo denunció en España, como “el único civil que participaba de los ‘vuelos de la muerte’” y que desempeñó su profesión de abogado llegando a ser funcionario judicial durante la última dictadura.
FUENTE: Infoanpress
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